miércoles, 8 de junio de 2011

Ultimate Loeb (Iván Rodríguez)


Jeph Loeb no se encuentra entre mis guionistas favoritos, pero tengo que reconocer que sus historias casi siempre me entretienen.

Lo cierto es que su Ultimates 3 me gusto muchísimo, y que con Ultimátum lo pase muy bien, y eso que ambas obras han sido bastante criticadas, siempre partiendo de que las series de Mark Millar eran mejores. Vale, Millar sí es uno de mis guionistas favoritos pero Loeb le cogió el relevo de forma más que digna en los Ultimates.

Pues ahora volvemos a tener a ambos autores en series Ultimate. Mientras Millar se dedica a Ultimate Vengadores con su estupendo estilo, Loeb guioniza la miniserie los Nuevos Ultimates con un tono más personal que Ultimates 3 y acompañado por el espectacular Frak Cho con los lápices.
Todo indicaba que Nuevos Ultimates iba a ser una gran obra, y quizá por eso me siento un poco decepcionado tras su lectura, ya que la historia es bastante plana y cuenta más bien poco. Paso de entrar en la crítica fácil diciendo cosas como: es que los Ultimate Vengadores de Millar son mejores. Pero como consumidor compulsivo de toda la línea Ultimate y viendo como Ultimate Spider-Man sigue mejorando número a número o lo interesante que fue Ultimate Thor de Hickman y Pacheco, Nuevos Ultimates se me queda como un producto de segunda. Es posible que mi decepción venga por la idea de que cualquier historia de los Ultimates tiene que resultar apasionante y se ha quedado en un cómic entretenido sin más.

Pese a todo mantengo la confianza en Loeb y tengo ganas de ver su Ultimate X, serie que leeré con menos prejuicios, ya que su predecesora no fue lo más interesante de la primera etapa Ultimate.

Resumiendo: Nuevos Ultimates no es una obra imprescindible, pero entretiene y mantiene parte del tono más adulto que siempre a caracterizado a los Ultimates, y en lo referente al dibujo un poco de lo mismo, Cho dibuja estupendamente (sobre todo las tías) pero no aporta grandes novedades, algo con lo que suelo disfrutar en la línea Ultimate dada la libertad que tienen los autores de crear nuevos diseños.

La primera generación mutante (Iván Rodríguez)

Fui a ver X-Men Primera Generación (X-Men First Class) con varios prejuicios, no sobre la calidad o lo entretenida que iba a ser, más bien en lo relativo a la intención del film. Estaba casi convencido de que la idea de los creadores era marcar un nuevo punto de partida para la franquicia, y me encontré con una precuela que encaja al cien por cien con las tres (cuatro si contamos con la peli de Lobezno) adaptaciones previas de La Patrulla-X, bueno, si nos ponemos un poco pijoteros encontraremos fallos de continuidad pero no voy a entrar en el debate de diferencias entre cine, cómic y aficionados.

El peso de la historia cae sobre los personajes de Xavier y Magneto, su amistad previa a su eterno enfrentamiento y la búsqueda de los que serían los primeros integrantes de La Patrulla-X (nada que ver con la original de los comics o los viestos en los films previos).

Entre las principales cualidades de la peli tengo que resaltar la parte en la que ambos protagonistas localizan y reclutan a los jóvenes mutantes, con cameo, de los que arrancan una sonrisa, incluido, la dignidad con la que se presentan los viejos uniformes negro y amarillo, y, por supuesto, la fabulosa intervención de Kevin Bacon como Sebastian Shaw (en una versión muy libre y novedosa).

Haciendo un breve repaso a las películas anteriores, tuvimos una presentación de lo más digna con el clásico enfrentamiento entre Xavier (Patrulla-X) y Magneto (Hermandad de Mutantes Diabólicos), una continuación con una nueva visión de “Dios Ama, El Hombre Mata” y, por último, la versión de la saga de Fénix Oscura con Morlocks incluidos. Con el film actual no podemos decir que los guionistas se basasen en un arco argumental determinado, más bien han recogido pedacitos de flash-backs vistos a lo largo de las colecciones mutantes y los han modificado a su gusto para encajarlos como origen de las historias antes mencionadas, con dinamismo y gran capacidad de entretenimiento.

Entre los puntos flacos de la peli tenemos una desafortunada (en algunos casos) elección de secundarios, tanto en personajes, Marea simplemente no mola, y actores, Emma Frost merecía una exhuberancia y sensualidad muy por encima de las posibilidades de January Jones. Pero otros personajes dan mucho juego, el ya mencionado Sebastian Shaw, Mística (y el triángulo / cuadrado amoroso que genera) y Azazel, un personaje tan prescindible en los comics como impresionante en pantalla, ya que nos da una versión malvada y retorcida de nuestro querido Rondador Nocturno.

Y volviendo a los protagonistas, tanto James McAvoy (Xavier) como Michael Fassbender (Magneto) hacen justicia a las versiones que hicieron los grandes Patrick Stewart y Sir Ian McKellen. Destacando que el primero se reconcilia con las adaptaciones comiqueras, ya que fue el protagonista de la infumable, desastrosa, y otros cientos de calificativos despectivos versión de Wanted.

Para terminar, una queja contra el cine en general y la película en particular: hubiese preferido una visión más “Ultimate” o actualizada de la historia, creo que La Segunda Guerra Mundial y La Guerra Fría son los periodos muy interesantes del siglo XX y de la historia de la humanidad, que pueden dar muchísimo juego en cualquier tipo de entretenimiento (cómic, cine, videojuegos, etc.) pero una versión más actual del origen de los personajes basada en otros acontecimientos históricos más recientes daría un toque de originalidad que echo en falta.