jueves, 20 de enero de 2011

Museo ABC (Javo Rodríguez)

Aunque existen excelentes guionista españoles lo cierto es que en el mundo de las viñetas y la ilustración los dibujantes son valorados en mayor medida, tanto en nuestro país como fuera de nuestras fronteras.

Este prestigio del dibujo español no es de ahora -que también- sino que se ha cimentado a lo largo de todo el siglo pasado. Artistas de todos los estilos han creado estupendas obras en carteles e ilustraciones así como en el diseño gráfico, la animación, la creación digital y, como no, en el cómic.

Desde el 17 de noviembre el Museo ABC se ha constituido como un espacio de homenaje a muchos (más de 15000) artistas gráficos. Situado en la calle Amaniel de Madrid, en el edificio que fue la fábrica de cervezas Mahou, el Museo ABC ofrece una magnifica muestra de parte de las 200.000 ilustraciones de su fondo, integrado por las publicaciones del diario ABC, Blanco y Negro, suplemento Gente Menuda...
La exposición titulada Una colección, un iceberg, muestra una pequeña parte de los fondos divididos en cuatro bloques temáticos que abarcan del simbolismo a la Movida madrileña. Las cuatro merecen la pena aunque personalmente me inclinó por la primera de ellas, la más antigua, que ofrece la posibilidad de contemplar dibujos de pioneros de la historieta como Atiza, Salvador Bartolozzi, K-Hito, Mecachis, Apel.les Mestres o Xaudaró, entre otros.
Parte de la exposición se exhibe de forma convencional, con ilustraciones en sus correspondientes vitrinas sobre la pared, pero otra gran parte, por razones de espacio, se exhibe en cajones instalados en grandes bloques rectangulares, al abrirlos los cajones se iluminan y permiten ver una o dos obras cómodamente, un sistema original -al menos yo no lo había visto- incluido dentro del exquisito entorno de las dos salas que albergan la exposición y que se completan con cómodas mesas en las que se puede contemplar el imprescindible (30 euros) catálogo.

Una visita agradable y, sobre todo, la esperanza de futuras exposiciones donde la historieta (Blanco y Negro es un tesoro) esté más presente. Su colaboración con la última edición de Expocomic parece un buen augurio. Si pasáis por Madrid no os lo perdáis, la entrada es gratuita y sólo tomarse un café en su acogedor bar ya merece la pena si andáis callejeando por el centro.