De todos es sabido que los cómics, los tebeos, han sido considerados tradicionalmente un medio dirigido al lector infantil y juvenil. A esto se unen varios factores que caracterizan a los lectores de cómics y los diferencian de (casi) todos los lectores de literatura.

En segundo termino el cómic, sobre todo en España está profundamente lastrado por la nostalgia y, de nuevo, por ser considerado un lenguaje infantil, lo que provoca que muchos lectores que abandonaron la lectura de historietas al hacerse adultos señalen entre sus historietistas o personajes favoritos a autores o protagonistas que no se corresponden en absoluto con su edad. Muchas librerías colaboran en esta ceremonia de la confusión colocando, sin ningún tipo de selección ni aviso, historietas que se dirigen a un público completamente diferente en lo que se refiere a su fecha de nacimiento.
En el fondo esto no es más que repetir la idea de que el cómic, la historieta, es un género en lugar de un medio de expresión que se dirige a lectores diferenciados, no sólo por sus intereses sino también por sus edades.
Cierto es que el cómic, como la literatura, posee una serie de títulos que pueden interesar a cualquier edad. Pero Stevenson -en los libros- o Claremont -en la historieta- son excepciones que confirman la regla.
Esta laxitud respecto a nuestro medio es una más de esa ceremonia de la confusión que, como ha señalado Iván en su post sobre Fotogramas y se puede ver en nuestra página de Facebook, es alimentada por la mayoría de la prensa. Por razones que no vienen al caso estoy revisando la serie de documentales Los años del NO-DO y los errores de las informaciones que se refieren a los tebeos son habitualmente erróneas.
No quiero acabar sin entonar un mea culpa, en Kioscopedia también cometemos errores pero puedo asegurar que no son por laxitud respecto al medio, sino por nuestra propia incapacidad, lo lamentamos y ofrecemos, siempre, la posibilidad de rectificación.
2 comentarios:
Pues podias poner a los entintadores
Pues llevas razón, pero somos muy pocos y tenemos nuestras limitaciones
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