Por razones personales tengo una especial simpatía hacia Mary “Noticias”, más por razones sentimentales que por pasión hacia las historietas creadas por Ricardo Acedo y Carmen Barbará. Mary “Noticias” fue el tebeo de mi chica.
Dejando de lado ese enganche sentimental Mary “Noticias” fue un tebeo renovador de lo que fue el tebeo femenino español.
En su aún no superado “El Cómic Femenino en España” (1975), Juan Antonio Ramírez sitúa a Mary “Noticias” entre los tebeos para chicas de “personaje fijo”, una derivación de lo que Ramírez denomina tebeos de tipo “sentimental-próximo”, mucho más cercanos a la realidad de el momento que los que clasifica como “exótico sentimental”, alejados en el espacio y el tiempo, situados en la época romántica del imperio astró-húngaro, en la Rusia zarista o en el exótico Oriente. Más lejanos aún estarían los del tipo “maravilloso”, caracterizados porque en la solución de los problemas planteados intervienen de un modo decisivo personajes y sucesos’irreales’ procedentes de la tradición folklórica: hadas, genios, enanos, brujas, encantamientos, etc.
Aunque en tebeos para chicas como Florita o Sissi, por poner dos ejemplos, existieron personajes fijos, hasta la llegada de los 60 no llegaron los cuadernillos apaisados, patrimonio del tebeo para chicos, con protagonista fija y exclusiva. Este tipo de tebeos se limitó, que yo sepa, a tan sólo tres colecciones: Lilian, azafata del aire, Mary “Noticias” y Jennie Smith.
Mary “Noticias” destacó frente a Lilian, azafata del aire en que esta última no dejó de ser una adaptación –plagio dirían otros- de la serie francesa Lili Hotesse de l'Air creada por Christian Mathelot, publicada en España por Florita desde 1957. Lilian, azafata del aire también contó con guiones de Ricardo Acedo, llegando hasta el #48.
Jennie Smith, posterior a Mary y Lilian, no pasó de la docena de entregas, con dibujos de Jordi Buxadé, se distinguió de Lilian y Mary en que la aventura no estaba presente.
Con estos datos Mary “Noticias” fue el único cuadernillo apaisado del tebeo español, con personaje femenino fijo y original, que combinó los aspectos sentimentales con los aventureros, lo que le convierte, junto con su importante tirada (484 ejemplares, sólo en la colección original) en un tebeo excepcional que se merecía una reedición menos dejada que la realizada por Glénat recientemente.
Los tebeos de Mary “Noticias” contenían siempre una historieta autoconclusiva, no existía, como en los tebeos similares para chicos, el mecanismo del continuará. Por otro lado la simpatía personal por el personaje no me hace obviar que las historias de Acedo son bastante simples, repetitivas en muchas ocasiones, y desde luego están muy por debajo de otros de sus trabajos anteriores y posteriores como Tamar, por ejemplo. El dibujo de Carmen Barbará es casi siempre estático, aunque sus preciosas chicas son siempre distinguibles y tiene una particular idea de la maquetación de las páginas original e interesante en muchas ocasiones.
El reciente tomo de Glénat se ha limitado a la publicación de las 15 primeras entregas, sin que parezca que haya una idea de continuidad, en su lomo no figura numeración alguna, ni la editora ha dado muestras de tener intención de publicar la colección completa, lo que realmente sería un poco absurdo, leerse Mary “Noticias” integral sólo sería interesante para algún loco que quisiese realizar una tesis doctoral sobre un personaje que no da para tanto.
¿Por qué, entonces, no se ha realizado una selección de los números más interesantes, que existen, en lugar de publicar los primeros a capón? Esto si se lo merecía el personaje y sus autores.
Uno de los aspectos más curiosos, por su innovación dentro del tebeo femenino español, es la relación de Mary (Mary Cuper Fernández, de nombre completo) con sus dos chicos, el serio y formal abogado Max (Maximiliano del Pozo) y el aventurero y bohemio con perilla Bruma. Chicos entre los que Mary parece debatirse sentimentalmente, de alguna forma coqueteando con ambos. Esto era algo absolutamente inusual en una protagonista de la época, con unos teneos para chicas que si algo tenían era unas altas dosis de moralina cristiano/franquista.
Que esto no nos lleve a engaños, Mary era “moderna”, pero dentro de un orden. Para empezar las dudas entre Max y Bruma las tenía Mary, pero sus lectoras ya eran conscientes desde el primer número que ambos eran la misma persona. Por otro lado la moral, la visión del papel dentro de la sociedad no se puso nunca en duda. si, amigas, la mujer debe trabajar, luchar y escalar puestos... ¡Pero nunca debe olvidar que ha nacido para ser la compañera del hombre! (Mary Noticias #458, citado por Antonio Altarriba en su excelente semblanza incluida en “La España del Tebeo”).
¿Cómo acaba Mary “Noticias”? Seguro que con Max y, probablemente, en boda, como muchos de sus episodios y la mayoría del tebeo femenino de la época.
Una pista nos la puede dar el final de la ya citada Lilian, azafata del aire, insito que también con guión de Acedo. Lilian dispone un chico, en cierta forma su propio Bruma, llamado Oscar (evidentemente piloto) quién en el último número le dice: Lilian, eres una muchacha maravillosa y la única mujer de mi vida, ¿estas dispuesta a sacrificar tu profesión para casarte conmigo... obviamente Lilian acepta.
Me pregunto como acaba Mary porque, como me sucedía siempre con los cromos, a pesar de tener bastantes entregas de la colección ¡me falta la última!. Pero, fuera de bromas, siento que la reedición de Glénat ha olvidado todos estos aspectos y que no responde más que a acrecentar unas ventas que le han ido muy bien con Purita Campos, algo contra lo que no tengo nada en contra, pero ¿por qué no dar un poquito más que pura nostalgia?
La afirmación anterior no deja de ser un juicio de intenciones teñido de algo de frikismo, lo se, pero hay aspectos de la edición que son objetivos.
La datación de la aparición del primer tebeo de Mary “Noticias” baila entre 1960 y 1962.
Juan Antonio Ramírez, José María Delhom o José Antonio Ortega Anguiano lo sitúan en 1960.
Antonio Altarriba, Jesús Cuadrado y Tebeosfera, entre otros, lo sitúan en 1962, si bien Tebeosfera en su inapreciable catálogo introduce una nota que dice: Aunque los datos más contrastados llevan a la conclusión de que el arranque de esta publicación fue en 1962, existe la posibilidad de que realmente fuera el año 1960, por los créditos que figuran en el cuadernillo número cuatro (en concreto el número del Depósito Legal datado con esa fecha; aunque es un dato no determinante puesto que los depósitos legales podían mutar por descuido o errores de los editores), lo que no deja de ser otro juicio de intenciones y da como Deposito Legal B-17861-1962.
En fin un autentico lío que, ingenuo de mi, esperaba que la reedición de Glénat me aclarase. No ha sido así.
En su primera página leo: Copyright 1960, para Ricardo Acedo y Carmen Barbára, y un poco más abajo, Los personajes de la serie Mary Noticias fueron creados en 1960, sobre idea y guiones literarios de Ricardo Acedo.
La cosa parece clara, pero, en la página paralela, dentro del prólogo del habitualmente bien informado Antonio Martín se puede leer: Pero será en 1962 cuando se producirá un gran vuelco con la aparición de un nuevo tebeo para niñas que se presenta bajo el título genérico de Colección Heroínas y el más concreto de Mary “Noticias. ???¡¡¡¡
Personalmente mantengo que Mary “Noticias” apareció en 1960, las razones son las siguientes:
1) Los autores más cercanos en el tiempo al tebeo - Juan Antonio Ramírez, José María Delhom y José Antonio Ortega Anguiano- dan este año como comienzo de la serie.
2) El copyright es de 1960.
3) La afirmación de Antonio Martín, será en 1962 cuando se producirá un gran vuelco con la aparición de un nuevo tebeo para niñas que se presenta bajo el título genérico de 'Colección Heroínas', es un pequeño desliz, ya que la Colección Heroínas es de 1960, en ella apareció Lilian, algo que no parece tener dudas.
4) Con todas las dudas que pueda plantear el Depósito Legal de aquellos años, Tebeosfera muestra un documento objetivo, con imagen, que señala a 1960 como año de inicio.
5) Mary “Noticias” Extra (segunda publicación del personaje) figura con 1962 como año de aparición en Delhom, Ortega Anguiano y Tebeosfera y sería bastante inusual que Ibero Mundial, la editora del personaje, sacase al mercado el mismo año ambas publicaciones. En contradicción con esto, Jesús Cuadrado y Antonio Martín sitúan la aparición de Mary Noticias Extra en 1964.
6) La primera reedición, con cuadernillos de 25 entregas en un tomo, sólo es nombrada por Tebeosfera y datada también 1962, lo cual vuelve ser extraño, no era habitual reeditar recopilaciones el mismo año de la edición del primer número.
A pesar de esto, la categoría de los expertos que dan como fecha 1962, me hace tener dudas de la datación de la reportera televisiva.
Probablemente todo lo anterior no sea más que una absurda duda de alguien que opina que estos datos son importantes, sobre todo en un tiempo donde los datos erróneos se reproducen como las amebas a través de Internet, algo que una web como Kioscopedia no esta libre, la diferencia es Kioscopedia es la obra de un aficionado, con ayudas personales, y Glénat es una editora más o menos potente que debería haberse currado bastante más la edición en tomo de Mary “Noticias”.
miércoles, 30 de junio de 2010
miércoles, 9 de junio de 2010
Kick-Ass, cómic y peli (Javo Rodríguez)
Vaya por delante que me gusta mucho Mark Millar, uno de los guionistas británicos de cómics que ha logrado la difícil tarea de renovar los cómics de superhéroes, entre otras cosas. Tiene la gran virtud, no por simple menos necesaria, de ser casi siempre muy divertido. Disfruté con The Authority, con Wanted, con Superman Red Son. Pero en Civil War me mosqueó bastante con una obra que comienza como algo apasionante y poco a poco va de más a menos finalizando de una forma decepcionante.
He leido Kick-Ass y he visto su versión cinematográfica casi al tiempo y con ambas me he sentido desengañado. Aunque hay diferencias entre las viñetas y la pelí no me parecen sustanciales, así que me referiré a Kick-Ass en general. Cuando comienzo a leer un cómic o a ver una película ya se que me meto en la ficción y lo aceptó. La ficción tiene sus normas. Si veo Condorman se que estoy en una ficción sobre el mundo real, por mucho que Woody Wilkins se disfrace de Condorman la historia se plantea siempre en el mundo real, todo lo fantástico que se quiera, pero nunca traspasa la frontera para introducirse en el irreal mundo de los superhéroes. Me he acordado de Condorman porque el comienzo de Kick-Ass, tanto en el cómic como en la película, me recordó a la vieja película de 1981, obviamente con un humor más bestia, pero ese comienzo y el posterior relato nos presenta un relato donde Dave Lizewski/Kick-Ass, como Woody Wilkins/Condorman, es un personaje de nuestra realidad, de este mundo, con sus reglas; no de ese otro mundo, también con sus reglas, que es el de los superhéroes. Como es evidente para cualquiera que me conozca -y para él que no lo sepa, lo aclaró- que me entusiasman las historias de superhéroes, entrar en ese mundo maravilloso donde la gente vuela o le salen garras de los nudillos. Lo que me jode es que me cambien las reglas a mitad del partido y esto es lo que ha hecho Millar en Kick-Ass. Lo que comienza como la posible historia de un friqui pringado, bastante normalito y poco dotado físicamente, que se pregunta por qué no hay superhéroes en la vida real, se va transformando, poco a poco, en una convencional historia de superhéroes vengadores, llegando al paroxismo tras el brutal asesinato de Big Daddy. El Dave Lizewski humano, que debe pasar una larga recuperación tras la primera paliza, se ha convertido en un autentico superhéroe, con una capacidad de recuperación mayor que la de Lobezno, capaz de realizar las hazañas de cualquier personaje de Universo Marvel o DC. Me han pasado, sin previo aviso, del humor paródico lleno de ingenio a lo de siempre, me han hecho trampas porque Mark Millar no sabe acabar la historia que inicia magníficamente.
El prologuista de la edición española del cómic, Celes J. López, se mete en un jardín, cuando comienza afirmando: "ESTE NO ES UN CÓMIC REALISTA", no se muy bien a que se refiere. Realistas son las obras artísticas o literarias basadas en la imitación fiel de la naturaleza y, según el propio López, "lo que cuenta podría pasar de verdad", afirmación que no deja de ser una contradicción, cualquier ficción relata algún hecho que "podría pasar de verdad" aunque no haya sucedido y, como de momento no soy Dave Lizewski, entre otras cosas no tengo edad para serlo, los superhéroes no pertenecen a este mundo. Continúa el prologuista "Aquí no hay poderes fantásticos, ni magia, ni maquinas futuristas..." bla, bla, bla...
Antes afirme que las diferencias entre el cómic y el film no son sustanciales, aun manteniéndome en lo dicho si señalo que en una peli que va de rompedora, se adoptan muchas de las convenciones del canon hollywoodiense, la diferencia que más canta es que el chico debe conquistar a la chica y así lo hace. También se echan de menos los divertidos diálogos fascistoides entre Bigg Dady y Hit-Girl. Big Daddy: "¿La definición de diccionario de demócrata?". Hit-Girl: "Un gilipollas trastornado capaz de manifestarse por el derecho de matar bebés y de convocar manifestaciones con velas por asesinos múltiples". La necesaria espectacularidad, caiga quien caiga, hace volar a Lizewski, ahora convertido en Red Richards, capaz de usa cualquier máquina.
El cómic y la pelí son divertidos pero francamente bastante frustrantes.
He leido Kick-Ass y he visto su versión cinematográfica casi al tiempo y con ambas me he sentido desengañado. Aunque hay diferencias entre las viñetas y la pelí no me parecen sustanciales, así que me referiré a Kick-Ass en general. Cuando comienzo a leer un cómic o a ver una película ya se que me meto en la ficción y lo aceptó. La ficción tiene sus normas. Si veo Condorman se que estoy en una ficción sobre el mundo real, por mucho que Woody Wilkins se disfrace de Condorman la historia se plantea siempre en el mundo real, todo lo fantástico que se quiera, pero nunca traspasa la frontera para introducirse en el irreal mundo de los superhéroes. Me he acordado de Condorman porque el comienzo de Kick-Ass, tanto en el cómic como en la película, me recordó a la vieja película de 1981, obviamente con un humor más bestia, pero ese comienzo y el posterior relato nos presenta un relato donde Dave Lizewski/Kick-Ass, como Woody Wilkins/Condorman, es un personaje de nuestra realidad, de este mundo, con sus reglas; no de ese otro mundo, también con sus reglas, que es el de los superhéroes. Como es evidente para cualquiera que me conozca -y para él que no lo sepa, lo aclaró- que me entusiasman las historias de superhéroes, entrar en ese mundo maravilloso donde la gente vuela o le salen garras de los nudillos. Lo que me jode es que me cambien las reglas a mitad del partido y esto es lo que ha hecho Millar en Kick-Ass. Lo que comienza como la posible historia de un friqui pringado, bastante normalito y poco dotado físicamente, que se pregunta por qué no hay superhéroes en la vida real, se va transformando, poco a poco, en una convencional historia de superhéroes vengadores, llegando al paroxismo tras el brutal asesinato de Big Daddy. El Dave Lizewski humano, que debe pasar una larga recuperación tras la primera paliza, se ha convertido en un autentico superhéroe, con una capacidad de recuperación mayor que la de Lobezno, capaz de realizar las hazañas de cualquier personaje de Universo Marvel o DC. Me han pasado, sin previo aviso, del humor paródico lleno de ingenio a lo de siempre, me han hecho trampas porque Mark Millar no sabe acabar la historia que inicia magníficamente.
El prologuista de la edición española del cómic, Celes J. López, se mete en un jardín, cuando comienza afirmando: "ESTE NO ES UN CÓMIC REALISTA", no se muy bien a que se refiere. Realistas son las obras artísticas o literarias basadas en la imitación fiel de la naturaleza y, según el propio López, "lo que cuenta podría pasar de verdad", afirmación que no deja de ser una contradicción, cualquier ficción relata algún hecho que "podría pasar de verdad" aunque no haya sucedido y, como de momento no soy Dave Lizewski, entre otras cosas no tengo edad para serlo, los superhéroes no pertenecen a este mundo. Continúa el prologuista "Aquí no hay poderes fantásticos, ni magia, ni maquinas futuristas..." bla, bla, bla...
Antes afirme que las diferencias entre el cómic y el film no son sustanciales, aun manteniéndome en lo dicho si señalo que en una peli que va de rompedora, se adoptan muchas de las convenciones del canon hollywoodiense, la diferencia que más canta es que el chico debe conquistar a la chica y así lo hace. También se echan de menos los divertidos diálogos fascistoides entre Bigg Dady y Hit-Girl. Big Daddy: "¿La definición de diccionario de demócrata?". Hit-Girl: "Un gilipollas trastornado capaz de manifestarse por el derecho de matar bebés y de convocar manifestaciones con velas por asesinos múltiples". La necesaria espectacularidad, caiga quien caiga, hace volar a Lizewski, ahora convertido en Red Richards, capaz de usa cualquier máquina.
El cómic y la pelí son divertidos pero francamente bastante frustrantes.
Etiquetas:
Cine,
Javo,
Kick-Ass,
Mark Millar,
Personajes
Kick-Ass (Iván Rodríguez)
Me ha gustado mogollón, me lo he pasado genial y me he reído hasta que se me saltaban las lágrimas.
Contando con que mi reacción ante el cómic fue la misma creo que la adaptación al cine, lejos de ser perfecta, ha sido de lo más correcta.
Me gustaría decir que la adaptación es tan fiel como me pareció Watchmen, pero flojea en varios puntos clave, como pueden ser el dar a conocer las intenciones de Bruma Roja desde el principio (joder, y puse a parir a los de Fotogramas por spoilear. Disculpas, solo había leído el cómic), mantener el heroico origen de Hit Girl y Big Daddy (en el cómic se desmitifica a los personajes de forma más cruel) o un edulcorado final que no me termina de convencer, ya que Millar putea mucho más al protagonista devolviéndolo a su estatus de repudiado friky escolar.
Es difícil encontrar una adaptación perfecta, y la que para mi lo consigue (la mencionada Watchmen) no dejó contento ni al autor (Moore nunca está contento, así que cuenta más bien poco) ni a muchos espectadores. Pero la adaptación de Kick-Ass es correcta (no pasa de ahí) dejando una peli entretenida y no recomendable. No me voy a engañar, si le digo a algún colega que vaya a verla tengo tantas posibilidades de que salga del cine encantado como de recibir una paliza y perder una amistad, así que mantendré el aséptico “a mi me ha gustado, pero no se si es el tipo de cine que te puede gustar a ti. Es que yo me lo pasé muy bien con el cómic, etc, etc”.
En cuanto a los actores hay que destacar la mejor actuación en mucho tiempo del venido a menos Nicolas Cage, un correcto Aaron Jonson como protagonista, un estupendo Mark Strong (como siempre) y una fantástica Chloe Moretz como Hit Girl comiéndose por completo a todos sus compañeros.
Ni el cómic es lo mejor de Millar ni la peli pasará a la historia, pero a quien le importa eso cuando va al cine a pegarse un atracón de palomitas y gominolas y a pasar un rato divertido. Pues eso, no se pueden leer ni ver obras maestras todos los días, pero ver como un friky se convierte en un superhéroe cuyo mayor poder es recibir hostias, se hace famoso gracias a youtube, le salen imitadores y acaba luchando contra la mafia tampoco es algo que se vea todos los días.
Contando con que mi reacción ante el cómic fue la misma creo que la adaptación al cine, lejos de ser perfecta, ha sido de lo más correcta.
Me gustaría decir que la adaptación es tan fiel como me pareció Watchmen, pero flojea en varios puntos clave, como pueden ser el dar a conocer las intenciones de Bruma Roja desde el principio (joder, y puse a parir a los de Fotogramas por spoilear. Disculpas, solo había leído el cómic), mantener el heroico origen de Hit Girl y Big Daddy (en el cómic se desmitifica a los personajes de forma más cruel) o un edulcorado final que no me termina de convencer, ya que Millar putea mucho más al protagonista devolviéndolo a su estatus de repudiado friky escolar.
Es difícil encontrar una adaptación perfecta, y la que para mi lo consigue (la mencionada Watchmen) no dejó contento ni al autor (Moore nunca está contento, así que cuenta más bien poco) ni a muchos espectadores. Pero la adaptación de Kick-Ass es correcta (no pasa de ahí) dejando una peli entretenida y no recomendable. No me voy a engañar, si le digo a algún colega que vaya a verla tengo tantas posibilidades de que salga del cine encantado como de recibir una paliza y perder una amistad, así que mantendré el aséptico “a mi me ha gustado, pero no se si es el tipo de cine que te puede gustar a ti. Es que yo me lo pasé muy bien con el cómic, etc, etc”.
En cuanto a los actores hay que destacar la mejor actuación en mucho tiempo del venido a menos Nicolas Cage, un correcto Aaron Jonson como protagonista, un estupendo Mark Strong (como siempre) y una fantástica Chloe Moretz como Hit Girl comiéndose por completo a todos sus compañeros.
Ni el cómic es lo mejor de Millar ni la peli pasará a la historia, pero a quien le importa eso cuando va al cine a pegarse un atracón de palomitas y gominolas y a pasar un rato divertido. Pues eso, no se pueden leer ni ver obras maestras todos los días, pero ver como un friky se convierte en un superhéroe cuyo mayor poder es recibir hostias, se hace famoso gracias a youtube, le salen imitadores y acaba luchando contra la mafia tampoco es algo que se vea todos los días.
Etiquetas:
Cine,
Iván,
Kick-Ass,
Mark Millar,
Personajes
Suscribirse a:
Entradas (Atom)